domingo, 11 de mayo de 2014

Discúlpame, de veras...


                                                                                                                                                        Se perdona
                                                                                                                                                              mientras se ama.








Discúlpame, pero ya no te quiero. Discúlpame, de veras, pero me quiero más a mí, y estar contigo me está matando.

Discúlpame, pero  hoy te amo todavía más. Discúlpame, de veras, pero amo este nosotros y estar contigo me hace ser mejor persona.

Discúlpame pero no sé lo que quiero. Discúlpame, de veras, pero no sabría tomar una decisión, hoy muchas cosas pero decisiones, no.

Discúlpame cuando te mienta. Discúlpame, de veras, las veces que te diga, porque te las diré, que me irá mejor sin ti, porque serán las veces que realmente lo piense.



Discúlpame cuando te abrace. Discúlpame , de veras, todos los abrazos con manos cerradas, abrazos en los que sólo está mi cuerpo y no fluye esa electricidad.

Discúlpame cuando te bese, Discúlpame, de veras, los besos dados al aire, besos atrapados en la espiral de nuestros cuerpos, que habrían sido los mejores, y los guardé todos para ti.

Discúlpame cuanto te abandone. Discúlpame, de veras, porque sabré que cometo el mayor error de mi vida y aun así me sentiré libre.

Discúlpame cuando me quede contigo. Discúlpame, de veras, todas las mañanas que amanezcamos juntos y no me dé por pensar que estaría haciendo en ese momento sin ti.


Nos pasamos la vida pidiendo disculpas por errores que hemos cometido, por corazones que dejan de latir por un nombre, besos robados y besos no dados, por llegar tarde o por no llegar nunca.

Gracias, por haberlo compartido conmigo. Gracias, de veras, por escogerme de entre todos para vivirlo conmigo, de hacerlo exclusivo y único y haberme permitido tantas disculpas.

Pero hoy no es día de decisiones, así que no tomaremos ninguna. Ni tú, ni yo, ninguno.
Hoy no admitiré disculpas, así que no malgastes el ofrecerlas. Yo tampoco me disculparé hoy.

Hoy haremos de este día el día definitivo, el día en que no hablamos y no escuchamos el uno al otro, el día que hubiera sido si nunca nos hubiéramos conocido, otro día cualquiera.


Y mañana…, mañana ya veremos.

AMB

1 comentario:

  1. Discúlpame, por no ser perfecto.
    Discúlpame, por todos mis defectos.
    Discúlpame, mil y una veces,
    para darte el amor que mereces.

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